Desconectar de verdad

Como uno de tantos sábados me dispongo a ir a “guirilandia”, no es otra cosa que mi lugar de trabajo, situado a un ratito de mi casa, pues yo vivo en el centro de Málaga capital y “guirilandia” se encuentra en Mijas costa.

Nos podemos situar en un día cualquiera de verano, pongamos… pleno agosto, son las 15:10 de la tarde… voy tarde que jode, debo de salir pronto ya que me cruzo demasiado personaje por la autovía, gente que se va de mudanza a la playa, moros con su casa a cuesta que vuelven a su tierra y mucha, muchísima gente que no tiene ni idea de conducir… ¡¡el carril izquierdo no es para circular!! Pero la gente se empeña en ir por él a 90 Km/h como máximo, sumando todos estos factores hacen que la autovía un sábado de verano sea una locura, por eso el salir de casa con casi una hora de margen para realizar un trayecto que en condiciones normales se tarda como mucho media hora, y no es que yo vuele por la autovía precisamente, aunque esa foto que me hizo un radar diga lo contrario, pero no viene al caso ese tema.

Para seguir con el tema que da titulo a este relato, voy a explicar como desconectar totalmente en unas vacaciones, cosas que los guiris, sin hacer distinción entre ingleses, franceses, alemanes o indios, por nombrar otro lugar fuera del continente europeo, hacen a las mil maravillas.

Decir que mi función en el hotel es hacer de botones, aunque realmente, como siempre digo a todo el que me pregunta en que consiste mi trabajo, es realmente un complejo turístico de apartamentos, repartidos a lo largo de un monte y yo tengo mi coche para transportar a los “inteligentes” guiris a sus apartamentos, a ellos y a sus muertos, no es ser grosero, me refiero a sus maletas que traen, que pesan un huevo.

Aunque no quiera nada mas que hago desviarme del tema, la cuestión es que los clientes del hotel llegan y desconectan de tal manera que solo me falta ir a levantarles la tapa del váter cuando tienen ganas de “mear”, me imagino la llamada a recepción y mi compañera contestando a la sugerencia de nuestro querido cliente… señorita la tapa del váter no se levanta sola y yo no aguanto mas… no se preocupe caballero ya mando al portero, que no es otro que el nombre del puesto que ocupo, que se ocupe de todo.

Así es amigos, los guiris desconectan de una forma que envidio y rozan la inutilidad, puedo contar el día que llamaron diciendo que no funcionaba una mini cadena, me acuerdo perfectamente del hombre, media hora antes lo había llevado a su apartamento hablando sobre la liga inglesa, una familia londinense era, total que al llegar al apartamento saludos con la familia y me dirijo a la mini cadena, ¿a que no sabéis el problemón que tenia? Que no había cambiado la pestaña de “tape” a “CD”, y eso, queridos amigos, que lo pone en ingles, por eso el hombre no tenia “cojones” de echar a andar la mini cadena, todos son disculpas cuando se dan cuenta de su inutilidad y por el paseo que me han hecho dar, yo con mi buena cara, puesto que el cliente siempre lleva la razón, voy saliendo del apartamento diciendo que no pasa nada, vaya que le entren ganas de suicidarse en nuestro apartamento y tengamos que bloquearlo una temporada.

Como estas tengo mil anécdotas de mi queridísima guirilandia… como cuando se dejan la llave puesta por dentro, aya que voy yo a desmontar el pomo para que puedan entrar, o no saber como se abre una puerta corredera… o no saber montar el sofá cama, por eso digo que son fallos de no investigar y de no querer mover un dedo, estos guiris cuando se van de vacaciones desconectan de verdad, total a ver que nos depara el día de hoy en guirilandia…